Hoy, 1 de mayo rememoramos las luchas de los trabajadores por jornadas laborares y salarios justos
En el marco del Día Internacional de los Trabajadores, nuestra solidaridad plena con los y las trabajadores del país, principalmente con aquellos que se encuentran en primera línea de batalla atendiendo la emergencia sanitaria por el COVID-19, muchos de ellos sin equipos de bioseguridad personal (EBPs) como a los médicos, enfermeras, obstetras, personal auxiliar de salud, nutricionistas de casi todos los hospitales del Perú, con contratos de trabajo precarios y mal remunerados. Con denuncias de los especialistas de salud que manifiestan que continúan laborando sin que se les abone su sueldo de tres meses. Sin olvidar a los miles de policías sin equipos de bio-protección, con los cuales muchos ciudadanos no colaboran acatando las medidas se seguridad sanitaria, con su hospital de la Policía Nacional desbastecido y lamentablemente con algunos de sus altos jefes policiales acusados de presuntos actos de corrupción.
En el Día del Trabajador, denunciamos y repudiamos, las políticas neoliberales y su discurso que siguen buscando cambiar la denominación de trabajadores para sustituirla por la de “colaboradores”, envilecimiento el lenguaje para negar la histórica contradicción capital-trabajo que no solo no ha desaparecido sino que se ha profundizado llevando a nuevas formas de trabajo esclavistas, con contratos precarios y una enorme desprotección laboral.
Por ello, no debemos olvidar a Jovi Herrera Alania (20) y Jorge Huamán Villalobos (19), jóvenes trabajadores que fallecieron asfixiados agitando un tubo de neón. Atrapados en un contenedor con candado, en un techo, en el trabajo clandestino de etiquetar una marca cara en un fluorescente barato. El 25 de junio de 2017 los envolvió el fuego en la galería Nicolini en Las Malvinas.
Asimismo, no dejemos que se pierda de nuestra indignada memoria las trágicas muertes de los jóvenes estudiantes trabajadores Carlos Gabriel Campos Zapata (19) y Alexandra Antonella Porras Inga (18), a causa de una descarga eléctrica la madrugada del 15 de diciembre, trapeando y baldeando el piso, en la cadena de fast food McDonald’s de Pueblo Libre y que en situación parecida falleció electrocutado el joven trabajador Víctor Ligarda Aguilar (24), en el almacén del Centro de Distribución Supermercados Peruanos (Plaza Vea y Vivanda) en el kilómetro 43 de la Panamericana Sur en Punta Negra, el 30 de enero de 2020.
Estamos ante un Estado que prioriza la inversión por encima de los derechos laborales, que ha abandonado su rol de promotor, planificador y fiscalizador frente a la arremetida neoliberal que ha impuesto el 'Estado mínimo'. No es casualidad que SUNAFIL no supervise adecuadamente y que cuando acuda a supervisar no pueda hacerlo inopinadamente. Por su parte, el Ministerio de Trabajo incline la balanza a los poderosos intereses empresariales o no tenga interés en contribuir a dar solución a los problemas del trabajo informal y su inseguridad laboral; que los sindicatos, desde tiempos de la nefasta dictadura fujimontesinista hayan sido fuertemente golpeados; que los grandes medios, en el mejor de los casos, solo difundan la tragedia y no se preocupan por profundizar en las investigaciones para sancionar a los responsables de tantas violaciones de los derechos laborales.
Por cierto, en éste 1 de mayo, desde el FA ratificamos en nuestro compromiso con la clase trabajadora del campo y de la ciudad. Seguiremos emplazando al Congreso de la República y al Ejecutivo para que se deroguen las normas antilaborales del gobierno de Martin Vizcarra como el Decreto Legislativo N° 345, el Decreto de Urgencia N° 214 y la disposición del Ministerio de Trabajo para la “Suspensión Perfecta”, en el contexto de la emergencia sanitaria por la pandemia mundial. Finalmente, nuestro rechazo a las diversas Bancadas del Parlamento que decidieron enviar el dictamen que había sido aprobado en la Comisión de Trabajo y Seguridad Social del disuelto Parlamento, en el que se consignaba que todo trabajador jubilado debía recibir al menos un salario mínimo vital como pensión base.
El FA, firme en la lucha por una reforma profunda del régimen laboral:
¡No al régimen especial laboral agroexportador!
¡No a la suspensión perfecta!
¡Eliminación del CAS en toda la administración pública!
¡No al inconstitucional desconocimiento de la negociación colectiva, sí a su defensa!
¡Respaldo a los trabajadores mineros para la reimplantación de la negociación por rama!
¡No a la evaluación punitiva de los maestros y si a su capacitación permanente!
¡Pago inmediato al personal de salud que se encuentra sin atención a sus reclamos ante el MINSA y EsSalud!
¡Pago inmediato de las deudas con los fonavistas y la deuda social con los maestros!
Lima, 1 de mayo de 2020.
Marco Antonio Arana Zegarra
Excongresista del Frente Amplio
Escrito por
Cajamarquino, sociólogo. Ecopolítica y derechos humanos. Líder de Tierra y Libertad.